lunes, 15 de junio de 2015

ENTREVISTA A ISABEL DONATO


“Es como si estuviésemos afuera de la naturaleza”

 

Isabel Donato es arquitecta, docente y observadora del planeta. Vive en un Ecobarrio en Salsipuedes que ella misma diseñó y dice: “Hay que formar nuevos pueblos en Argentina.” En Córdoba mismo ya hay proyectos iniciados. Donato es una de las primeras referentes de la construcción en barro en el país, y en esta nota nos habla sobre los edificios con granjas, de lo humano dentro de las instituciones y del subdesarrollo de nuestra especie.

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En conferencias y charlas usted dice que hay que abandonar las ciudades. ¿Por qué?
Es un planteo que repito desde que se hizo el famoso informe Brundtland durante la primera cumbre climática, en 1987 en Oslo. El informe dice que las ciudades van a quedar como monumentos de una época en donde la humanidad se volvió loca. Venimos de un sistema de absoluta insustentabilidad que fue creando progresivamente el ser humano y que incrementó de un modo abismal el mundo de los negocios, en donde se crea una necesidad para luego cubrirla, incluso sin importar el valor intrínseco del ambiente y del ser humano. Esa especie de ruptura que se ha dado en esta civilización – la primera en la historia de la humanidad en que el mercado regula las relaciones sociales – alerta y pone en peligro el hábitat del ser humano. Y eso se refleja claramente en las ciudades.
A ver.
Si no hay combustible, no llega ni agua, ni alimento, ni energía – y la ciudad se hunde en cinco minutos. Lo que tratan los urbanistas hoy en día es mirar con una mirada más amplia a la geopolítica y buscar fuera de las ciudades áreas que sustenten a su ciudad. También se está trabajando en proyectos como ciudades flotantes o edificios auto sustentables con una granja adentro y que se abastecen de energía.

Suena como de una película de ciencia ficción. 
Pero es real. Todo eso ya está pensado, organizado, administrado y en las escuelas de diseño industrial se estudian. Hay muchas propuestas tecnológicas interesantes, para utilizar los extraordinarios recursos de la naturaleza en favor del proceso del desarrollo del ser humano. Conjuntamente no separadamente. 

¿Cómo sería eso?
Qué la tecnología sea útil para el humano y que respete al ecosistema. Ahí hay fuerzas inconmensurables que mover que ni siquiera las queremos mover porque estamos usando la misma electricidad que inventó Edison y eso ¡no tiene sentido! No tiene sentido hacer una represa en Patagonia, que financian los chinos para traer la luz a Córdoba. Ya existen sistemas de acumulación de energía solares con poli imanes. Cada casa puede tener su luz sin necesidad de una represa en Patagonia. Lo que pasa es que hasta que todo eso no signifique un gran negocio, no se va aplicar.

¿Sin negocio no hay avances?
Es que nosotros, los grupos que quieren el cambio, todavía no tenemos en nuestro poder la ciencia y la técnica. Porque si se junta ciencia y técnica para hacer un invento y ese invento va en contra del negocio, lo tiran a la basura o matan al inventor de un tiro. ¿Cuántos inventos se han hecho que después fueron comprados por una empresa y que no han sido puestos en funcionamiento?

Volvamos a su planteo de abandonar las ciudades. Desde el año 2007 vive más de la mitad de la humanidad en ciudades o centros urbanos.
Si todos los que vivimos en las ciudades nos vamos al campo, se acaba el planeta tierra...

... si seguimos viviendo en la misma forma.
Exactamente. Si nosotros aprendemos a vivir comunicado con la tierra utilizando sus recursos e incrementando su valor reproductivo no tenemos por qué. Está comprobado que la cantidad de hormigas que hay en el planeta tiene la misma masa física que la cantidad de hombres. Las hormigas pueden matar nuestro jardín, pero no matan el planeta, al contrario: lo favorecen en sudesarrollo. Como especie encontraron la forma de convivir incrementando el recurso en vez de matarlo. Pero nosotros matamos los recursos que usamos.

El humano: una especie subdesarrollada.
Tenemos que comprender cómo se desarrollan los procesos de la naturaleza e incorporarlos a nuestra forma de vida, es decir, integrarnos realmente a la naturaleza. No para ser primitivos y comer únicamente frutas del bosque. Sino que cuando creamos niebla o producimos lluvia, tenemos que tomar la energía del sol, del viento y generar los avances que queremos generar en el infinito, pero dentro del proceso de la naturaleza, no destruyéndola. Pero eso la sociedad no lo valora. Si no compran el agua en botella o no les llega una factura de red ¡les importa un pito! Es como si estuviésemos afuera de la naturaleza.

Funcionamos como robots. 
Sí, por este mundo extraño, paralelo, que se ha dado, que es el mundo del negocio y del mercado. Pero este mundo va acabar con nuestro planeta ¡y no es broma! Ningún sistema se puede mantener estable. Los sistemas – sean naturales, físicos, biológicos o sociales – evolucionan o sucumben.

¿Cómo podemos romper con ese comportamiento destructivo?

Estamos en un punto que necesitamos dar un salto evolutivo. Y si no lo damos, vamos a sucumbir. Eso lo saben los científicos, los pensadores, los filósofos, los teólogos y hasta el Papa lo sabe. En ese proceso hay fuerzas que nos arrastran a sucumbir y hay otras fuerzas que nos apoyan a dar el salto evolutivo, esta conversación misma aporta al salto. David Sempau lo describe en su libro Las cosas por su nombre: El vuelo de una mariposa puede inclinar en un sentido el salto evolutivo o no. Cada cosa que hacemos nosotros dice él – y yo lo comparto – sería como el vuelo de esa mariposa que va apuntando al salto evolutivo. Así, llegará un momento en el que se va a juntar tanta energía hacia el salto evolutivo que solo se va a dar.
Es decir: ¿Construir con barro, meditar, organizarnos en grupos o sembrar la tierra como ayuda a nivel metafísico?
A nivel físico y a nivel metafísico.
Tendremos que confiar en esa posibilidad.
Empezar a confiar y creer es la base del paso que tenés que dar. Porque si no confiás y no creés y abrís el diccionario del escéptico, no vas a dar ningún paso. Queda todo ahí clavado y te va a arrastrar como una piedra.
¿Hay que formar nuevos pueblos?
Yo creo que sí, hay que formar nuevos pueblos. En realidad ya estamos en eso. Ya hay gente en la Provincia de Córdoba que está ofreciendo tierras para empezar. Hace poco leí una nota en Internet de alguien que está ofreciendo 80.000 hectáreas en la provincia de Chubut.

¿Las ofertas vienen de privados?
Son privados, sí. Los gobiernos – por más avanzados que sean – están  atados al sistema imperante, dentro de una especie de rueda que no tiene asidero.
¿No ve la posibilidad de que dentro de los gobiernos se pueda girar hacia otra dirección?
Los gobiernos y universidades no están rígidos, porque están organizados por seres humanos.  Entonces hay gente, que tiene sus quiebres y cada dos por tres sale algún directivo del Banco Mundial que habla de lo mal que están las cosas y arma revuelo. Las instituciones son palpables porque hay seres humanos ahí. Igual hay que ir por abajo de esta rueda sin asidero y apoyar a los otros. Acá por ejemplo, un sector muy fuerte que tiene clara las cosas y que están en el pico del cambio, son los grupos de los pequeños campesinos y de los campesinos indígenas. Ellos demuestran a los gobiernos con números que en el lugar de cortar los algarrobos y utilizándolos bien, tendrían más recursos por hectáreas que plantando soja. Claro que no podemos dejar de producir soja de un día para el otro, sino se nos viene la noche. Pero sí apoyemos a otra gente a ver qué pasa.

Mencionó proyectos para formar nuevos pueblos. ¿De qué se trata exactamente?
De armar grupos de aldeas sustentables en toda la zona de las Sierras (Provincia de Córdoba). Estamos preparando una plataforma digital, en donde la gente se puede anotar si quieren dar tierra gratuitamente o paga, si quieren trabajar o si quieren vivir. Cada uno puede ofrecer algo, sea trabajo, dinero, material o conocimientos.  Todavía no está publicado y ya hay gente que se ofrece.
La gente está esperando por alguien que lo organice...
...y que tenga – una mala palabra del capitalismo – el knowhow (se ríe). Nos buscan porque tenemos el knowhow por la experiencia con el Eco barrio de Salsipuedes. Quieren ver qué errores cometimos y qué pueden hacer mejor. Entonces eso muestra la efervescencia que hay.
¿Y entonces por qué la mayoría sigue viviendo en las ciudades?
Si no se sale de manera masiva, es porque no se encuentra la facilidad para hacerlo, o porque a los que lo han intentado les fue mal. No somos campesinos, no estamos preparados para vivir en comunidad, ni para autoabastecernos o conformarnos con eso.
Hay muchos proyectos que fracasan.
Muchos, pero no todos.
No estamos preparados para irnos de las ciudades.
No, no estamos preparados. La gente confunde su deseo con su capacidad de hacerlo. Quieren irse de la ciudad y cuando están en el campo se asustan: Ay un escorpión! ay una víbora! ay la tierra está muy baja! Pero siempre hay grupos más sólidos que tienen mayor consciencia, mayor impulso y voluntad de organizarlo y también mayor sacrificio. Son grupos que están haciendo punta mostrando que sí es posible hacerlo.
* Periodista en transición
Ecoportal.net  www.proecosanmiguel.com
proecosm@gmail.com


martes, 2 de junio de 2015

Imagining God as a woman?


Por Lola Barh
 

La iglesia de Inglaterra está considerando reescribir los textos cristianos donde se hace referencia a Dios como mujer.

Este es el título de un artículo que nos hemos encontrado en el periódico Telegraph del Reino Unido, donde se nos informa de un movimiento que está causando algunas revueltas al querer considerar que Dios no tiene género.

Desde que en Inglaterra se eligiera a la primera mujer obispo (Libby Lane) el lenguaje a la hora de ofrecer el servicio de lectura de los textos bíblicos está modificándose y cada vez se está usando más el pronombre ella o la palabra madre.

Como era de esperar hay quienes están de acuerdo con estos cambios y hay quienes se oponen a ello.

Algunos están de acuerdo en que Dios es intangible, un espíritu, pero no todos opinan igual.

Lo que si se ve claramente es que con la incorporación de mujeres a altos cargos en las iglesias se están produciendo cambios; hacia donde nos llevaran estos cambios? Está por ver, pero el hecho de que se considere un asunto a revisar ya es un paso.
Y el otro paso es que el lenguaje para referirse a la Divinidad también está cambiando, y esto último ya es un hecho.

Las conclusiones del artículo es que Dios no tiene género y que quizás en un futuro se deje de imaginar a Dios en el cielo como un hombre o como una mujer, si no simplemente como algo que no nos podemos imaginar.


Adjunto el link del artículo -que merece la pena leerlo-.

http://www.telegraph.co.uk/women/womens-life/11642822/Church-of-England-God-as-a-woman-Thats-like-farting-against-thunder.html?placement=CB3

lunes, 1 de junio de 2015

MUJERES SABIAS....MUJERES KUNCÁAC



Las mujeres y hombres Kuncáac son altos y graciosos. Viven en el desierto de Sonora, México. 
Kuncáac significa “nuestra gran raza materna aquí “. Llegaron hace siglos de Asia a la isla del Tiburón y adaptados a este desierto conservan algunas de sus tradiciones en sus trajes coloridos, en sus rituales, en sus cantos, en sus artesanías y alimentos. Antiguamente se vestían con piel de venado y plumas de pelícano, semidesnudos. Actualmente las mujeres elaboran trajes muy coloridos con telas y listones que consiguen en los pueblos cercanos. Para cada ocasión se maquillan resaltando los colores rojo, azul y blanco, elaborados con vegetales y plantas.
Han vivido como nómadas hasta hace unas décadas en el desierto, en íntima relación con el medio que les rodea, desarrollando una sociedad sin igual de caza, pesca a cargo de los varones y de recolección de alimentos y conocimiento de las plantas medicinales, en donde las mujeres juegan el papel principal.

Su lenguaje sorprendente se transmite por las abuelas a través de sus fascinantes cantos que enseñan lo que es la vida. Describen su relación profunda animista que expresa su estrecha relación con la naturaleza y el cosmos. 

Entre sus costumbres, las mujeres están obligadas, más que los hombres, a compartir con específicos miembros del grupo familiar, una de las dos comodidades (posesiones materiales o alimentos) y los que las reciben deben compartirlas también. Las mujeres en especial deben compartir -si la tienen- la carne para alimentarse. Acumular riquezas sería como admitir mezquindad.

Siguen preservando algunos rituales como cuando las niñas inician su menarquia, en donde se convive jugando con un dado tradicional, en comida comunal y la jovencita va con su madrina que le maquilla la carita para la ocasión y la recluye en una choza durante 4 días, en donde le canta y le enseña cómo vivir la vida. La niña se abstiene de comer carne y una noche antes de la fiesta debe permanecer despierta. Antes del amanecer, algunas mujeres la llevan a la playa donde, ceremonialmente, la purifican lavándole el pelo con agua de mar. Eso indica que ya está lista para dar vida. 

Antiguamente el chamán del clan era el que sugería –además de guiarles- con quien había que emparejarse. En la actualidad para hacerlo debe tener el varón el consentimiento de la jovencita. Cohabitan de entre 6 meses  a un año o más, y si se acoplan siguen juntos. Durante este tiempo la familia del joven da una serie de regalos a la familia de la señorita. En la antigüedad no se intercambiaban votos. Actualmente se casan en la iglesia.

El nuevo esposo está obligado a ayudar en la manutención de los suegros mientras vivan. Las separaciones son raras. Casi siempre permanecen con la misma pareja toda su vida. Está prohibido el matrimonio entre los miembros de la misma familia, incluyendo a los primos.

Las mujeres son las intermediarias en las relaciones de convivencia. El hombre tiene muchas más restricciones que la mujer, no puede hablar directamente con su padre, sus tíos, sus hermanos, sus hijos después de que llega a la pubertad, y tampoco con sus suegros y la mayor parte de sus parientes políticos.

Otro ritual que conservan es el del tejido de una planta que consideran sagrada, el haat -torote prieto-, para hacer canastas llamadas “coritas” en donde las mujeres tejen historias. La planta la transportan sobre sus cabezas y después de un proceso alquímico y de teñido natural, la mujer canta y reza para que la canasta no rechiñe ya que lo consideran de mala suerte. Si rechina vuelven a empezar el tejido para que la canasta se contente. Cada canasta se elabora con una intención y su magia llega al que la compra o recibe como ofrenda. Tiene varios usos como el de cargar al bebé dentro de la canasta transportándolo sobre la cabeza de la madre.

Su gran amor a la música se puede observar en el toque de los instrumentos que fabrican como el violín de una cuerda, el arco musical, varios tipos de flautas, el palillo raspador y las sonajas, y en los cantos que realizan las abuelas aprendidos de sus antepasados, a través de los cuales se transmite “cómo vivir la vida en armonía con los demás”.
Conocen más de 425 especies de plantas del desierto, así como a su uso medicinal y alimentario.

Son el único pueblo en el mundo del que se sabe han cosechado un grano de mar (Zostera marina) y comido su nutritiva semilla. Tienen un importante conocimiento en la biología y comportamiento de la tortuga caguama de mar.

Los españoles les llamaron “los Seris”. El intento de conquistarles hasta después de 1900  junto con epidemias, casi causó su extinción. Para 1930 eran solamente 160. Hoy, el número es de más de 900 personas de las cuales el 52% son mujeres.

En la actualidad por la presión del gobierno se ven inmiscuidos parcialmente en la política, en la educación y en las religiones, padeciendo castigos por no comportarse “como marca la ley”, perdiendo poco a poco sus tradiciones, dejando poco a poco el nomadismo y padeciendo enfermedades propias del mundo occidental. Consideran al dinero como el diablo, pero necesario para sobrevivir. Así los indígenas se van volviendo extranjeros en su propia tierra.

En este enlace pueden ver un corto video de las mujeres de esta etnia:
Nota: Parte de este artículo fue escrito por Edward Moser en 1976, poco antes de su muerte.
FUENTES:
http://www.sonoraturismo.gob.mx/Seris.php
http://tesis.uson.mx/digital/tesis/docs/10940/Capitulo1.pdf
http://www-01.sil.org/Mexico/seri/A003e-Pueblo-sei.htm
http://www.cdi.gob.mx/index.php?option=com_content&task=view&id=605&Itemid=62
 http://asignatura-regional-1.blogspot.mx/2013/06/etnias-de-sonora-seris.html

http://www.lutisuc.org/etn%20seri.