lunes, 16 de junio de 2014

LA OTRA CARA DEL MUNDIAL



En tiempos de deporte y diversión, también existen las bambalinas. 
Y entre bambalinas parece que no deja de ocurrir lo mismo de siempre. 

Nos pareció interesante compartirles este artículo, que por otra parte, nos aporta un toque de esperanza, a través de la acción de una periodista -Andrea Dip- que busca una reflexión más profunda de este estigma femenino: la prostitución.


Fuente: diario "La República" de Uruguay, día 16 de junio de 2014

CONSUMO DE SEXO Y TRÁFICO SEXUAL

La otra cara del Mundial

Brasil es el segundo destino, después de Tailandia, para viajeros, turistas y proxenetas implicados en el turismo sexual. El 25% de los 1.500 destinos turísticos de Brasil tiene como uno de sus negocios más importantes la prostitución. En un país en plena convulsión social y reacción política al Mundial de Fútbol recién comenzado, se espera que la demanda de oferta sexual crezca.
Según datos de Unicef, 500 mil niñas y niños menores de edad son víctimas del delito de explotación sexual en Brasil. Se estima que 600 mil turistas asistirán al Mundial de Fútbol que se juega en ese país, de lo que se deduce que el mercado de la compra y venta de sexo podría incrementarse debido al vínculo entre el aumento del consumo de prostitución y la ocurrencia de los grandes eventos deportivos.
En relación al estatus legal de la prostitución, existe en Brasil un proyecto que reglamenta la actividad, llamado Ley Gabriela Leite, que está parado en la Cámara de Diputados. Mientras tanto la Marcha de las Vadías (o Marcha de las Putas) no para de crecer junto con el debate legalización vs. abolicionismo, y un enorme abanico de consignas que abarcan desde el acoso callejero, la legalización de la prostitución y la denuncia de las injusticias de la FIFA.
Andrea Dip es una periodista brasilera que recorrió durante tres meses el nordeste del país junto al ilustrador De Maio, para hacer periodismo de investigación en una excelente y realista serie de historietas acerca de la vida de las jóvenes que se prostituyen (o son forzadas a hacerlo) en la ciudad de São Gonçalo do Amarante, municipio brasileño del estado del Ceará, perteneciente a la región metropolitana de Fortaleza.
Entrevistada para Comunicar Igualdad, Dip señaló que a partir de la investigación “Meninas en jogo” (“Chicas en juego”) pudieron identificar varios tipos de prostitución, explotación sexual y trata. Una de ellas son las poderosas redes de narcotráfico que trabajan con conexiones internacionales que permiten el tránsito de las mujeres hacia Europa desde el litoral brasileño, las que son perseguidas por fuerzas especiales de la policía nacional.
“La gran mayoría de las mujeres que hicieron parte de nuestra investigación son personas que van circulando por todo el país”, sitúa Dip. Muchas mujeres jóvenes que viven en condiciones de pobreza, negocian la venta de su cuerpo (“hacen programa”) a cambio de una dosis de pasta base”, agrega la periodista.
Las historietas de “Meninas en jogo” son efectivas en la precisión de la información que brindan y en la visualización de estos casos a través de la narrativa en viñetas. Asimismo, el reportaje de Dip remarca que, para el desarrollo del turismo sexual, las redes organizadas se sustentan en dos pilares: por un lado la oferta generada por la vulnerabilidad socio-económica, emocional y/o psicológica de la persona victimizada y, por el otro, la demanda o el cliente, beneficiado por la impunidad en una cultura machista.
Las cifras también hablan por sí solas: el año pasado las denuncias sobre tráfico de niñas, niños y adolescentes aumentaron un 86%, al tiempo que las formas de explotación aparecen de maneras no tradicionales. Unicef informó de 1,2 millones de niñas y niños que son traficadas en el mundo, las principales víctimas son negras, asiáticas y de origen latino. Brasil no es la excepción: allí la mayoría de las mujeres explotadas son afrodescendientes y de clases populares, con edades que oscilan entre 15 y 27 años.
Preocupante legado post Copa
Representantes de organizaciones de mujeres brasileras señalan la falta de atención en las políticas sociales que generen empleo efectivo durante la Copa, así como el cuidado en los impactos sociales del evento. “Vamos a vivir en un Estado de excepción” resumen ante el endurecimiento de las leyes que reprimen la protesta social, pero que protegen de manera laxa a los turistas y extranjeros durante el evento futbolístico.
En virtud de las responsabilidades del Estado en función de la disminución del delito de explotación sexual, Brasil cuenta con un 2° Plan Nacional de tráfico de Personas, que involucra a 17 ministerios y tiene 115 metas a cumplir hasta 2016, entre ellas la capacitación de profesionales de varias áreas, la creación de más de diez puestos de atención en ciudades de frontera, la aprobación de proyectos de ley que impliquen la pérdida de bienes implicados con el tráfico de personas y la internacionalización del mismo. También se han creado los servicios de denuncia telefónica “Disque 100” y “Disque 180”, centrales de denuncia que funcionan 24 horas al día.
Consultada respecto de la efectividad de estas instancias de denuncia, Dip detalla: “Lo que nosotros vimos en Ceará fue que existe una delegación de combate de la explotación sexual de niñas, niños y adolescentes para toda la ciudad. Cuando las denuncias llegan son encaminadas a los Consejos tutelares y a esa delegación. Las delegaciones no tienen gente suficiente para dar seguimiento a todas las denuncias y además la denuncia de explotación sexual es diferente a la de abuso. Si el caso de explotación es flagrante, y si la delegada o la policía llega allá tres días después no va a encontrar a esa chica en esa situación.
Entonces, es muy difícil que se pueda penalizar a una persona, principalmente cuando es extranjero, allí se pone más difícil todavía. Cuento en el reportaje que la primera noche cuando estaba entrevistando a una persona en un bar, en la mesa de al lado había una chica de 12 o 13 años con un hombre viejo, entonces llamamos a una comisión tutelar y nos respondieron ‘no tenemos carro para poder ir’. Después llamamos a la policía y nos dijeron ‘si no están haciendo nada obsceno no podemos hacer nada’, ahí quedó clara esa impunidad… Podemos tener leyes más duras pero ¿cómo la gente es responsabilizada, penalizada de hecho?”.
“Meninas en Jogo” recuerda en cada tramo los derechos que protegen a niñas, niños y adolescentes y cita literalmente: “Todo niño/niña tiene derecho a una plena protección contra todas las formas de explotación y abuso sexual” (Declaración de Estocolmo sobre explotación sexual de niñas y adolescentes, 1998).
Dip resalta su sensación de que las políticas públicas que están siendo implementadas no facilitan el diálogo con las mujeres y niñas que están sufriendo la vulneración de sus derechos: “Hay chicas que hacen ‘programas’ a cambio de 5 reales y esto es un fenómeno nuevo que está aumentando. Hay muchas caras para el problema del tráfico de personas, pero generalmente hay una relación con la extrema pobreza y la falta de perspectivas. Los programas sociales son raros y son muy hechos ‘desde arrib’. No se conversa ni se intenta un diálogo con esas chicas, entonces se les ofrece una beca de estudios pero las niñas tienen que ser mayores de edad o tener la primaria completa, y eso no sucede porque muchas abandonaron la escuela. Esa falta de diálogo dificulta todo aún más”.
Aquí les copio algunas entradas en donde se pueden ver los comic de Andrea Dip
http://jubileosuramericas.net/hq-meninas-em-jogo/
http://apublica.org/2014/05/hq-meninas-em-jogo/

Publicado por Claudia 

No hay comentarios:

Publicar un comentario